"Los estereotipos de género y las normas culturales han justificado durante mucho tiempo la violencia contra las mujeres, reforzando creencias perjudiciales como que 'los hombres son agresivos mientras que las mujeres son sumisas'. Estas creencias crean una cultura en la que el maltrato se normaliza", afirma Suchandra, nuestra asesora en salud mental. El trágico caso reciente del asesinato y agresión sexual de una doctora en el hospital RG Kar ha llamado la atención nacional e internacional sobre la vulnerabilidad de las mujeres. Es crucial explorar las causas profundas que convierten a las mujeres en blanco fácil de estos delitos.
El horrendo crimen contra una doctora en un importante hospital público de Calcuta ha desatado la ira y las protestas en todo el país, con la participación activa de estudiantes de Calcutta Rescue. En Calcutta Rescue creemos que el cambio empieza en nuestras comunidades. Nuestros proyectos educativos incluyen formación integral en sensibilización de género para niños en edad preescolar, adolescentes y adultos jóvenes. También hemos creado un "Club de Chicos" especial, dirigido por nuestro trabajador social Souvik, en el que chicos de barrios marginales participan en debates sobre salud mental y los prejuicios de género a los que se enfrentan.
Souvik, el director del club de chicos, explica: "Nuestros chicos son cada vez más conscientes y cuestionan las normas patriarcales en sus familias y en la sociedad. pueden reconocer actitudes misóginas y alzar la voz cuando son testigos de tales comportamientos. Los alumnos y sus profesores organizaron una marcha de protesta cerca del centro educativo Talapark".
"No podemos quedarnos callados si siguen ocurriendo cosas así en nuestra sociedad", afirmó Rohan, miembro de nuestro club de chicos.
"Estoy de acuerdo. Alzar la voz contra estos horrores es el primer paso. Tenemos que recordar estos crímenes y trabajar en nuestras comunidades para prevenirlos", añadió Soham. "Espero que más chicos se unan a nosotros para protestar contra la violencia contra las mujeres".
Organizamos periódicamente talleres y sesiones con los padres de nuestros alumnos en los que hablamos de cómo pueden producirse abusos en casa, de la importancia de educar a niños y niñas por igual desde una edad temprana, de mantener a los niños alejados de los medios de comunicación que glorifican la masculinidad tóxica y de crear espacios seguros para los niños en casa.
Aunque no existe una solución rápida para acabar con la violencia contra las mujeres, un cambio duradero requiere años de formación sobre los roles de género, abordar los estereotipos arraigados y una educación sexual integral desde una edad temprana. Es hora de que el cambio venga de dentro. Juntos podemos crear una sociedad en la que todas las mujeres puedan vivir sin miedo.